Poesía al alcance de todos
Poesía al alcance de todos

Entrevista a Sahida Hamido

Escritora y poeta desde los ocho años. Madre de tres hijos, en la actualidad trabaja como administrativa en una gran empresa. Su gran vocación es escribir. Residente en Terrasa (Barcelona). Amante del arte en general y de las buenas conversaciones, le preocupan los temas sociales del mundo en que vivimos. Entre 2010 y 2011 administró su propio blog: El Café de Sahida. En 2015 participa con un relato titulado "Una mujer al borde del abismo" en el libro Wollstonecraft. Hijas del horizonte (Imagine Ediciones), libro homenaje a Mary Wollstonecraft, madre de Mary Shelley (Creadora de Frankenstein). Y en 2016 publica su primer poemario Diario de una mujer de aire (Bookolia Editorial).

  1. ¿Quién es Sahida Hamido?

—Como escribió Walt Whitman, podría decir que soy inmensa, contengo multitudes. Difícil explicarse a una misma, resumiré diciendo que soy poeta y que escribo por pasión. Para mí escribir es como respirar, me define, me salva, me da voz.

  1. ¿Cómo empezaste en esto del mundo de la poesía? ¿Qué te llamó de ella?

—Creo que realmente, en mi caso, no se trató de empezar. Era algo que estaba latente en mi interior. La poesía me eligió, no a la inversa. Hubo un episodio muy intenso, a los 8 años, al ver la película "La cabaña del tío Tom", que fue el detonante. Yo ya había leído mucha poesía y ese desgarro interior al sentirme identificada con el sentimiento de asfixia que veía, me llevó a escribir mi primer poema de forma natural.

  1. ¿Quiénes son tus referencias culturales para la poesía?

—La lista sería muy larga, y con los años se ha ido ampliando y todavía hoy descubro poetas que me impactan. Mi padre tenía un libro que eran "Los 25.000 mejores versos de la lengua castellana" y con esos empecé, que eran bastantes. Tengo, eso sí, una especial debilidad por Alejandra Pizarnik, pero como te comentaba, hay demasiados poetas que han formado (y forman) parte de mi bagaje poético y sería injusto nombrar sólo algunos.

  1. Háblanos de tu blog, El Café de Sahida ¿Qué te impulsó a crear un blog?

—En ese tiempo, el año 2010, llevaba poco tiempo en una red social y por primera vez tuve el deseo de compartir mis poemas y escritos. Creé el blog como forma de abrir una ventana a otras personas, pero reconozco que no soy muy buena en tecnologías y al implicarme más en redes sociales lo fui dejando algo aparcado. Debería volver a darle vida.

  1. ¿Crees que internet es la mejor plataforma para transmitir poesía al mundo?

—No sé si es la mejor, pero sí que permite llegar a un mayor número de lectores. Tal vez pierde la calidez de la cercanía física y los poemas de ayer o anteayer se pierden en el histórico de publicaciones, pero es una forma de darse a conocer y generar interés por el propio trabajo que pueda impulsar a un lector potencial a querer leer más, a buscar un libro tuyo o conocer más de tu trabajo.

  1. Hablemos ahora de tu trabajo, ¿Qué puede puedes contarnos sobre tu relato Una mujer al borde del abismo?

—Fue mi primer ejercicio de valentía. La antesala del libro que publiqué después. Fernando Marías, como editor, me propuso escribir un testimonio real de alguien, que siglos después que Mary Wollstonecraft, supiese de oscuridades, de relaciones convulsas con la vida y la muerte. De todos los relatos del libro es el único que no es ficción. Fue muy duro escribirlo, con mi nombre real y dar ese salto desde el anonimato del que ya no hay vuelta atrás. Pero fue muy liberador.

  1. ¿Y de tu primer poemario Diario de una mujer de aire?

—No quería hacer un poemario al uso, y decidí hacer una combinación de poemas y textos que había escrito durante varios años. Puede decirse que mi libro nació a partir de mis estados de Facebook, que fui recopilando y a los que añadí poemas y otros textos. El resultado es un libro donde se combina la crudeza y el dolor con la belleza. También me costó decidir publicarlo, porque es desnudarme y tocar temas muy duros para mí, pero ahora, al ver que en cuatro meses se agotó la primera edición y ya vamos por la segunda, me ha dado fuerza para seguir trabajando. He recibido críticas y opiniones de los lectores muy emocionantes y eso es lo que vale la pena realmente.

  1. ¿Crees que hoy en día la poesía tiene una buena aceptación en nuestra sociedad?

—Creo que mucha más que años atrás. Cuando de jovencita decía que era poeta, generalmente era lo mismo que ponerme en la frente un cartel de loca o identificar mi vocación con algo pasajero de romanticismo femenino, esa condescendencia a algo que se suponía temporal. Aunque ahora, con el boom poético de redes sociales es casi al contrario. Hay poetas por doquier. A mí me gusta que se viva la poesía, pero es un oficio muy duro. Una parte es talento, otra tal vez un don y otra mucho trabajo. El tiempo pone en el lugar que corresponde a cada cual, lo importante es respetar la palabra escrita. La poesía debe remover las entrañas, llegar a quien lee. Ese es el verdadero logro.

  1. ¿Piensas que la poesía es esencial en la vida humana? Dinos, ¿Qué es la poesía para ti?

—Hay poesía allá donde mires. Todo es susceptible de ser versado, como terapia, como denuncia, como deseo de inmortalizar la belleza, describir un sentimiento, un amor, un terror, un dolor... Es absolutamente necesaria. La poesía para mí es como respirar. Es como mi sangre. Mi compañera, mi gran amor, la tabla de salvación a la que me aferro cuando siento que todo se viene abajo. Es mi vida.

  1. Ahora vamos a enfocar la entrevista un poco en ti. Sabemos que eres madre de tres hijos y trabajas en una empresa de administración ¿Es difícil compaginar tu tiempo para escribir con tu día a día y tu trabajo?

—Es dificilísimo. Le robo horas al sueño cada día. Aunque a veces la inspiración llega en un momento inesperado y algún poema ha nacido entre una cazuela de pasta, un hijo en un brazo y el ordenador abierto con un archivo de word al que acudir corriendo a escribir un verso. El tiempo para escribir acaba encontrándose y todo sacrificio vale la pena.

  1. ¿Te sobra tiempo para tener algún hobby personal?

—Pues no, la verdad. El poco tiempo que puedo encontrar lo dedico a leer que es mi otra gran pasión. No concibo mi vida sin libros.

  1. ¿Qué consejo le darías a los jóvenes poetas que están empezando?

—No me considero la persona adecuada para dar consejos, pero sí les diría que lean mucha poesía, que conozcan el oficio y sus técnicas para poder saltárselas si les apetece después. Que busquen su propia voz y no teman arriesgar, crear, inventar, vivir la poesía. Y sobretodo, que escuchen su voz interior si les nace desde las entrañas. Escribir desde las entrañas es la clave para mí.

  1. ¿En que estas trabajando actualmente? ¿Puedes ofrecernos un adelanto?

—Tengo un segundo poemario finalizado y un tercero sin acabar. Sólo que dada la aceptación del formato de "Diario de mujer de aire", estoy pensando en hacer cambios para llegar también a los lectores potenciales a los que un libro sólo de poesía les aburre. Ha sido muy llamativo que personas que nunca habían leído poesía me hayan escrito explicándome cómo les ha gustado la dinámica de mi libro y su acercamiento al género. Veremos a ver si puedo sorprender con el próximo libro. Al menos lo intentaré.

  1. Para finalizar la entrevista... ¿Cómo podemos dar contigo en la Red y así poder seguir tu trabajo, hacerte encargos o hablar contigo?

—Pues hay varias maneras, en Facebook como Sahida Hamido o mi página Sahida Hamido, escritora. En twitter como @sahidahs y en instagram como sahidahamido. También se me puede contactar por correo electrónico a la dirección eloise301@gmail.com Intento responder con la mayor brevedad, aunque no siempre puede ser inmediato. Y los encargos si son del libro, también se pueden hacer en la página web de Bookolia o en librerías.

 

Muchas gracias por dedicarnos tu tiempo.

—Muchas gracias a vosotros, ha sido un placer.

Entrevista realizada por Jesús Mesado

Recomendar esta página en:

Poesías del Mundo en redes sociales: